El Cenarec se manifiesta ante escaza cobertura de Juegos Parlímpicos
Foto: Sherman Guity, primer atleta costarricense en ganar una medalla paralimpica, sosteniendo la bandera de Costa Rica.
El Cenarec insta a los medios de comunicación a ser inclusivos, esto ante la poca (casi nula) cobertura que se le ha dado a los Juegos Paralímpicos y a la delegación de atletas costarricense que participa en ellos.
Aunque nuestro ámbito de competencia es el educativo, nos vemos en la necesidad de hacer este llamado a la reflexión y toma de conciencia respecto a la equidad y el respeto por las personas con discapacidad en el sector del deporte.
Y es que, pese a la existencia de numerosa legislación nacional e internacional, y después de tantos esfuerzos por crear una sociedad justa, igualitaria, equitativa, inclusiva y respetuosa de los derechos humanos, se siguen invisibilizando a ciertas poblaciones.
Se requiere ofrecer las mismas oportunidades para todas las personas y en todos los espacios con el fin de alcanzar una verdadera inclusión social, a partir de una participación plena en equiparacion e igualdad en derechos.
Un ejemplo que demuestra que muchas cosas aún requieren de atención y mejoras en los medios de comunicación: notas periodísticas sobre la Lengua de Señas Costarricense (Lesco), que no tienen interpretación, así que la información deja por fuera al público meta que es el propio usuario de ella.
La Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de las Naciones Unidas, suscrita por Costa Rica desde el año 2008, indica en su artículo 5 que “Los Estados Partes reconocen que todas las personas son iguales ante la Ley…”
Continúa: “Los Estados Partes prohibirán toda discriminación por motivos de discapacidad (…) A fin de promover la igualdad y eliminar la discriminación, los Estados Partes adoptarán todas las medidas pertinentes para asegurar la realización de ajustes razonables.”
Quiere decir esto, que no hay fundamento para discriminar a este grupo poblacional en cuanto a informaciones se refiere, al contrario, se debe velar por su participación plena en todo momento.
Como deportistas con discapacidad de alto rendimiento, estas personas pasan años, largas y extenuantes horas para clasificar, entrenando con el fin de representar a nuestro país ante el mundo. Se superan a sí mismas cada día, venciendo barreras mentales, físicas y actitudinales que imponen el entorno y la sociedad, ya que no hay impedimento más grande a la equidad, que la segregación y la falta de oportunidades.
Es común que en nuestro medio se incentive a las personas menores de edad a ser grandes deportistas, siguiendo el ejemplo de representantes de fútbol, atletismo o natación, pero ¿qué pasa con aquellas personas con discapacidad desde su infancia o que adquirieron la condición siendo adultas, que desean tener ejemplos a seguir en atletas en quienes verse reflejadas?
Con y sin discapacidad, todas las personas tenemos los mismos derechos, no hay diferencia, la línea divisoria la trazamos nosotros mismos cuando limitamos las oportunidades, cuando no brindamos condiciones de equidad al crear y sostener barreras que impiden que se logre la verdadera inclusión. En este sentido los medios de comunicación son fundamentales para la divulgación y toma de conciencia de acciones que promuevan la inclusión en todos los ámbitos y niveles de la sociedad.
Entendemos que los medios de comunicación son entidades privadas, y pueden decidir qué publicar y qué no, pero el acceso a la información es un derecho humano, es uno de los pilares de la libertad de pensamiento y expresión, por tanto, hacemos un llamado a sus propietarios y directores a formar parte del cambio, a no excluir, sino más bien, a sumar esfuerzos con acciones concretas que fortalezcan las bases de una sociedad democrática que brinde las mismas condiciones y oportunidades para toda la población, incluyendo aquellas personas que han sido históricamente excluidas y vulnerabilizadas, como es el conglomerado con discapacidad.
En nombre de la Dirección Ejecutiva y todo el personal del Cenarec, esperamos que atiendan el llamado que la población en situación de discapacidad hace desde hace muchísimos años, para que se le tome en cuenta, se le de espacio y sea parte “del todo” y en todos los aspectos del quehacer humano.
Falta mucho por hacer, para convertirnos en una sociedad que valore y acepte la diversidad de las personas que la conforman, pero cada acción cuenta, por lo que esperamos hacer conciencia de la necesidad imperiosa de realizar cambios inmediatos en nuestras acciones y decisiones.
